Los puentes conectan, los puentes unen, los puentes son elementos de paso entre dos orillas, los puentes ayudan a salvar accidentes geográficos. Asimilamos el concepto de puente a movilidad, pero un puente puede ser, sin perder sus convencionales características, un lugar en sí mismo, un lugar donde permanecer, un espacio donde relacionarse, un sitio para disfrutar. El puente Bostanli, en la bulliciosa Esmirna, además de conectar las dos porciones de ciudad separadas por el río del mismo nombre es un espacio público en sí mismo.
Izmir o Esmirna es la tercera ciudad de Turquía y tal vez sea la más occidentalizada. Está frente al Mar Egeo y el río Bostanli la divide en dos zonas diferenciadas. En una acertada decisión municipal se decidió crear un gran espacio público en un terreno ganado al mar, junto a un elegante puerto deportivo y conectarlo con un puente sobre el referido Bostanli que lo uniera con otra zona mucho más degradada de la ciudad. Con la intervención conectora se pretendía revitalizar y regenerar “la otra orilla”.
El gran acierto del Studio Evren Başbuğ ha sido dotar al elemento conector del carácter de espacio público. Se diseñaron un conjunto de plataformas de madera sobre el mar, con una serie de elementos que surgían del suelo y adquirían formas de bancos corridos para sentarse y contemplar el mar con sus impresionantes puestas de sol. El puente fue concebido como una plataforma más, tal vez la principal, por ser la que más próxima estaba de la orilla a regenerar. Los bancos corridos de las plataformas del espacio conocido como Bostanli Sunset Lounge interactúan con el banco corrido del puente creando un espacio unitario de gran calidad urbana, aunque cada micro zona se vive y percibe de manera distinta.
El puente Bostanli tiene una sección longitudinal ligeramente arqueada, que además de conferirle una gran belleza, permite el paso de embarcaciones pequeñas por debajo. La infraestructura proporciona una vista sobre la bahía y otra sobre la ciudad, teniendo una serie de secciones transversales cambiantes y asimétricas. Este diseño permite que el puente pueda ser usado como lugar de cómoda y agradable estancia para disfrutar de la puesta de sol. En definitiva, el conjunto formado por el puente Bostanli y las plataformas del espacio Bostanli Sunset Lounge han conseguido crear un gran espacio urbano, prolongar el paseo marítimo, pero sobre todo contribuir a regenerar una porción degradada de la ciudad. Leer más aquí
Francisco Camino Arias | Arquitecto