Las auténticas fronteras no son las artificiales y arbitrarias líneas imaginarias que separan unos estados de otros. Las fronteras que separan de verdad suelen ser los límites entre la pobreza y la abundancia, entre el bienestar y la escasez, entre un mundo reglado y un submundo informal, perteneciendo, muchas veces, los referidos diferenciados mundos al mismo estado, gobernado por las mismas personas.
La “gran frontera” es la que produce la desigualdad. Si existe un país donde las enormes diferencias económicas entre los diversos grupos sociales, se puede visibilizar con nitidez éste es Sudáfrica, a pesar de los avances de estos últimos años. El auténtico “apartheid” sigue existiendo, pero ya no lo provoca la legislación a favor de una raza sobre otra, sino las grandes diferencias económicas entre ellas. El final del citado “apartheid” ha sido virtual, formal, pero no real.
El fotógrafo Johnny Miller, usando drones ha realizado un impresionante y clarificador trabajo de visibilización de las “fronteras de la desigualdad”. Unas veces un río, otras una montaña, alguna vez nada, una línea invisible, marcan la separación de dos mundos, que viven dándose la espalda. Zonas bien estructuradas, con calidad en su diseño urbano, seguras, bien dotadas, están separadas por elementos virtuales de sectores informales, desestructurados, con graves carencias.
En Canal Fuctura creemos que estas situaciones se dan, con mayor o menor intensidad, en todo el planeta, incluso en nuestro entorno más próximo. Pero lejos de aceptarlas con resignación, creemos que, con una serie de medidas, fáciles de implementar, tanto de organización territorial, como de redistribución espacial de la riqueza, pueden ayudar a superar estas desigualdades que, además de ser tremendamente injustas, lastran el desarrollo de la sociedad. Leer más aquí